Más información sobre Saudigitus en su sitio web: https://saudigitus.org/
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Con la ayuda de los expertos de DHIS2, Guinea-Bissau utilizó el software central de DHIS2 y aplicaciones personalizadas para agilizar los procesos clínicos, de laboratorio, de certificación de viajes y de vacunación para COVID-19.
Guinea-Bissau ha utilizado DHIS2 para la gestión de la información sanitaria desde 2011, y fue uno de los primeros países en adoptar los paquetes de vigilancia COVID-19 de DHIS2 poco después de su lanzamiento en marzo de 2020. Esto incluía el cribado en el punto de entrada, la investigación de los casos y el seguimiento de los viajeros en cuarentena, así como el aislamiento sanitario y el seguimiento de los casos confirmados. El proceso de implementación implicó la localización -especialmente la traducción de los metadatos y la guía del paquete al portugués- y la adaptación a los requisitos locales, y se llevó a cabo con el apoyo de Saudigitus(HISP Mozambique), el Instituto Nacional de Salud, el PNUD y la OMS.
Sin embargo, el proceso de toma de decisiones que condujo a la selección de DHIS2 como plataforma nacional para los datos de COVID-19 no fue sencillo. Al principio se barajaron otras opciones. Se introdujo una herramienta basada en Excel y Access para recopilar datos de laboratorio, que funcionaba en paralelo a DHIS2, lo que provocaba que la información se almacenara en silos.
El gobierno de Guinea-Bissau nombró una alta comisión para la respuesta al COVID-19, y uno de sus principales retos fue coordinar todas las actividades y sistemas de información relacionados con el coronavirus. Saudigitus, un grupo HISP establecido con años de experiencia en la prestación de apoyo DHIS2 a la comunidad lusófona, fue invitado a participar en el proceso de revisión.
Las pruebas de laboratorio son un componente clave de la vigilancia de COVID-19, y una respuesta eficaz requiere disponer de un sistema en el que los datos sobre los casos sospechosos de coronavirus, sus contactos y los resultados de las pruebas puedan integrarse perfectamente. La situación en Guinea-Bissau al comienzo de este informe distaba mucho de ser perfecta. Los datos de laboratorio se introducían en Excel y se almacenaban en bases de datos Access que no estaban vinculadas al sistema centralizado de datos sanitarios, y los resultados de las pruebas se enviaban a los centros sanitarios en formularios de papel, donde debían introducirse manualmente para añadirlos al sistema nacional de vigilancia de COVID-19 DHIS2.
Se pidió a Saudigitus que colmara las lagunas del proceso y facilitara la integración de datos entre estos distintos sistemas. El primer paso consistió en ampliar el sistema DHIS2 COVID-19 del rastreo de contactos al contexto de las pruebas de laboratorio. Para ello se creó una aplicación «Index Case», que vinculaba los datos de los pacientes almacenados en DHIS2 Tracker con los resultados de laboratorio, y permitió a los laboratorios y centros de salud imprimir los resultados de la prueba COVID-19 directamente desde el sistema DHIS2, y simplificó el proceso de informar de los resultados positivos de las pruebas tanto a los pacientes como a los trabajadores sanitarios responsables del rastreo de contactos.
La necesidad de nuevas herramientas no se detuvo con los resultados positivos de las pruebas. En virtud de las restricciones de viaje introducidas por el gobierno de Guinea-Bissau, los viajeros debían demostrar que habían dado negativo en las pruebas de COVID-19 antes de que se les autorizara el viaje en avión. Rápidamente surgió un mercado negro de resultados negativos de la prueba COVID-19 y, debido a la ausencia de una base de datos centralizada y consultable en la que se almacenaran los resultados, a las autoridades les resultó muy difícil y llevó mucho tiempo determinar qué resultados eran legítimos y cuáles falsos. La integración de los datos de los resultados de las pruebas en DHIS2 hizo posible esta validación a través de un código QR que se incluyó en el PDF de resultados de laboratorio producido por el sistema DHIS2, y Saudigitus desarrolló una aplicación para Android que permitía a las autoridades fronterizas de los puertos de entrada realizar esta validación electrónicamente escaneando el código QR en sus dispositivos móviles.
El siguiente reto que se planteó a Saudigitus fue cómo hacer menos engorroso el proceso de control COVID-19 en los puertos de entrada. La posibilidad de introducir casos directamente en DHIS2 fue útil, pero incluso con una introducción mínima de datos y controles de temperatura para los viajeros que llegaban, las colas de espera en las fronteras y aeropuertos se hacían muy largas. Para resolver este problema, desarrollaron una aplicación a la que los viajeros pueden acceder a través de un portal web público en el que envían sus datos biográficos directamente al sistema DHIS2. El viajero recibe un código generado por el sistema que el trabajador sanitario que realiza el control de entrada escanea en su dispositivo móvil para acceder al registro del viajero en DHIS2. Todo lo que tiene que hacer el trabajador sanitario en ese momento es verificar los datos e introducir la temperatura del viajero, lo que reduce el tiempo dedicado a la introducción de datos por persona y, por tanto, el tiempo que los demás viajeros tienen que pasar esperando su turno.
Otro ámbito en el que los largos tiempos de espera dieron lugar a innovaciones fue el de las colas para programar los exámenes COVID-19, ya que la apertura de las fronteras a los viajes provocó que un gran número de personas quisieran solicitar los exámenes a la vez. Para ayudar a resolver este problema, Saudigitus creó un formulario en línea en el que los ciudadanos pueden enviar su solicitud de una prueba de COVID-19, y que utiliza la información biográfica que envían para crear un registro de seguimiento para ellos en DHIS2, de modo que esta información ya está introducida en el sistema de pruebas de laboratorio antes de que lleguen para someterse a la prueba. Este sistema también facilita a los centros de pruebas la previsión de la demanda de pruebas, para una mejor asignación de recursos y personal.
Un elemento clave de la estrategia de Guinea-Bissau para responder a COVID-19 -y del trabajo de Saudigitus para ayudar a llevar a cabo esta estrategia- ha sido la implementación de herramientas y recursos de cara al público. En Guinea-Bissau, esto incluye un panel de control público en el que cualquiera puede consultar en línea la situación actual de la pandemia de COVID-19 a escala nacional. Y este planteamiento es especialmente innovador cuando se trata de sistemas como las aplicaciones de registro en el punto de entrada y de programación de pruebas de laboratorio, en las que la información enviada por el público pone en marcha el proceso de creación de su registro personal en Tracker y, por tanto, simplifica enormemente la carga de introducción de datos para los trabajadores sanitarios, haciendo que todo el sistema funcione de forma más eficiente. Ambas aplicaciones, más el formulario web en el que los ciudadanos pueden comprobar los resultados de sus propias pruebas COVID-19, son accesibles a través de un portal web de acceso público.
A lo largo de la pandemia de COVID-19, Saudigitus ha proporcionado apoyo a la implantación, desarrollo de aplicaciones y formación no sólo a Guinea-Bissau, sino también a los otros cuatro países de la gran comunidad lusófona africana. Los sistemas mencionados son sólo algunos ejemplos de su trabajo. En Guinea-Bissau se están desarrollando mejoras adicionales de estos sistemas, como la notificación de los resultados de laboratorio por SMS. A medida que las vacunas contra la COVID-19 han estado disponibles, Saudigitus ha aprovechado sus asociaciones locales y su capacidad de innovación para apoyar el despliegue de DHIS2 con el fin de gestionar las campañas de vacunación contra la COVID-19 en Guinea-Bissau, Mozambique, Cabo Verde y Santo Tomé y Príncipe.
Más información sobre Saudigitus en su sitio web: https://saudigitus.org/